Gobierno volverá a evaluar factibilidad de puente sobre canal de Chacao

• En abril el ministro de Obras Públicas, Laurence Golborne, hará entrega del estudio de factibilidad técnica al Presidente, que en su visita a Puerto Montt el año pasado anunció la reactivación de los estudios para un posible reimpulso de la obra.

Santiago, Chile. 30 marzo, 2012. El añoso proyecto del puente sobre el Canal de Chacao, que uniría a la isla de Chiloé con el continente, vuelve a reflotar esta vez de la mano del Ministerio de Obras Públicas (MOP) y sólo se espera la venia del Presidente Sebastián Piñera para concretar su inicio. Se invertirían unos US$ 10 millones en la preparación de las bases de licitación de la obra.

Fue en el gobierno de Ricardo Lagos donde nació esta posibilidad de conexión, por lo que se hicieron todos los estudios técnicos y económicos para construirlo. Pero en el mandato de Michelle Bachelet se paralizó la discusión por considerar que el costo era muy alto (unos US$ 1.000 millones), y el proyecto siguió dormido.

El ministro Laurence Golborne señaló que para el MOP es muy importante la conectividad entre las distintas regiones, sobre todo la de la isla grande de Chiloé, “si es que hace sentido desde el punto de vista económico y social”, dijo a los medios.

Golborne agregó que el proyecto es importante desde el punto de vista geopolítico y social, pero que todo depende del valor del acero, que es “variable y muy difícil de predecir”, explicando que el 70% del costo del proyecto tiene que ver directamente con el valor de éste metal y que dada la variación de su precio, la rentabilidad social que se exige desde el Ministerio de Desarrollo Social para poder aprobarlo también varía.

En el MOP hay cerca de 50 cajas de información respecto de este añoso proyecto, por lo que de contar con la aprobación del Presidente Piñera, todos esos estudios deberán ser revisados y catalogados. Sólo en esto se gastarían US$ 10 millones.

Si el Presidente decide dar luz verde al proyecto, el puente sobre el Canal de Chacao podría estar listo el año 2018. Dado que sólo las bases de licitación podrían estar listas en un año, el proceso para la adjudicación del proyecto sumaría otro año más, mientras que para su construcción se tomarían tres o cuatro años adicionales.