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Inmobiliarias apuestan por barrios aledaños a nuevos tramos del Metro

09/12/2014

  • La construcción de las nuevas líneas L3 y L6 del tren subterráneo podría proyectar rentabilidades del 8% anual en los ejes de las zonas norte y sur poniente de Santiago, comenta uno de los ejecutivos.

Fuente: Portal Inmobiliario

Inmobiliarias apuestan por barrios aledaños a nuevos tramos del Metro.

La extensión de las líneas de Metro L3 y L6 abre grandes posibilidades para el sector inmobiliario en las comunas que serán beneficiadas (ver recuadro). La primera conectará Huechuraba con el centro de Santiago, Ñuñoa y La Reina, y la segunda une la futura Ciudad Parque Bicentenario en Cerrillos hasta el Estadio Nacional, para luego virar hacia el norte por Avenida Pedro de Valdivia hasta llegar a la estación Los Leones.

Ese es el caso de Quilicura, afirma José Miguel Guzmán, gerente General de Inmobiliaria Lo Campino, en donde existe una amplia y creciente oferta de viviendas desde las 2.000 a 5.000 UF. “Nuestro plan maestro considera seguir desarrollando proyectos al interior de Valle Lo Campino, ubicado al sur de la autopista Vespucio norte en Quilicura. Este sector es el que concentra la mayor y más variada oferta de viviendas nuevas, y un polo de desarrollo residencial que atrae crecientemente a familias de profesionales jóvenes”, explica. Según estimaciones del ejecutivo de Lo Campino, “durante éste y el año 2015 se estarían comercializando más de 350 viviendas en la zona de Quilicura para este segmento, con un 50% de la venta en verde”.

En esta dirección también apunta Inmobiliaria Socovesa con sus 463 viviendas nuevas como parte del proyecto Tierra del Fuego, y de las cuales solo quedan 30 unidades en su última etapa. “Se trata de un desarrollo acogido a subsidio DS01 para la clase media emergente. En ese mismo sector tenemos un saldo de terreno con un potencial de desarrollo entre 140 y 260 casas”, comenta Julio Cañas, de Socovesa. “Mi impresión es que acá es donde realmente impactará la extensión de la Línea 3. En el caso de San Bernardo, la extensión de la línea 6 viene a complementar la red del Metrotren. En este último sector tenemos el proyecto Los Cóndores, concebido bajo distintas líneas y perfiles de desarrollo. Por un lado, están Parronales de Nos y, próximamente, Cerro Negro que son proyectos de subsidio. Por el otro, está Laguna Cóndores, un proyecto de largo plazo segmentado en barrios que atienden a distintos grupos de clase media y media alta”, especifica el ejecutivo.

Mayor plusvalía
Durante el año pasado el precio de las casas de sectores con estaciones de Metro cercanas –en un radio de 750 mts.- se fijó alrededor de las 8.200 UF. En el año 2000, en tanto, el precio promedio fue de 5.846 UF, lo que representa un aumento en 14 años del 39%, según un informe de la consultora Arenas & Cayo elaborado en base a las transacciones que consignó el Conservador de Bienes Raíces de Santiago. En el caso de los departamentos el incremento fue algo más bajo, lo que se explica porque su demanda fue en directa relación con la entrada en operación de las líneas del tren subterráneo. La llegada de nuevas extensiones del Metro “siempre ha sido tremendamente positivo. Tenemos experiencias en San Miguel, en Macul y en Las Condes, todas exitosas. En esos tres casos la gente pudo percibir un beneficio concreto y significativo sobre su calidad de vida, pudiéndose conectar con las distintas oportunidades y servicios que la ciudad tenía para darles”, comenta Julio Cañas, gerente de Proyectos de Inmobiliaria Socovesa.

En comparación a la zona sur oriente, en el trazado de la L3 hacia Quilicura se puede apreciar un mayor incremento de valores debido al retraso en infraestructura urbana que presenta la zona norte de Santiago. Con las nuevas obras en transporte público se proyecta que los mercados de Independencia y Ñuñoa sean los más beneficiados, pensando en radios inmediatos y en viviendas para el segmento de 1.500 a 2.500 UF.

El valor agregado llegaría no solo al entorno, sino también a los inmuebles ya existentes y a los por construir en las zonas aledañas a las extensiones de la red del tren urbano, otorgándoles una mayor plusvalía. “Los sectores dentro del radio de las nuevas líneas del Metro son los que se están viendo más beneficiados con el aumento de su plusvalía, que incluso podría alcanzar hasta un 30% más”, sostiene Andrés Ergas, gerente Comercial de Ralei Grupo Inmobiliario.

El ejecutivo da como ejemplo el caso de Ñuñoa. “Esa comuna ha mostrado un alza importante gracias a la llegada del nuevo centro comercial en Plaza Egaña y, también, por las nuevas estaciones de Metro que se sumarán a las ya existentes”.

Los mismos factores sumados a las restricciones de edificación en Santiago Centro han beneficiado, también, a la comuna de Independencia. “Su mayor potencial de desarrollo urbano y carácter residencial la están convirtiendo en una excelente opción habitacional, aumentando considerablemente su plusvalía desde 2010 a la fecha. Por ser una zona cercana al centro, los departamentos más demandados en esta zona son los de 1 y 2 dormitorios con 1 baño”, puntualiza Ergas, cuya inmobiliaria ya cuenta con el proyecto Independencia Park ubicado a tres cuadras de la futura estación Hospitales. “Las plusvalías serán muy interesantes una vez que dichas líneas comiencen a funcionar. Las rentabilidades en esos ejes podrían llegar al 8% anual, por lo que resulta una interesante opción de inversión”, advierte el ejecutivo.

Si bien la inversión inmobiliaria se puede intensificar en las zonas con nuevas alternativas de conectividad, también hay que considerar los costos por el ingreso de permisos de edificación. Frente a esto, Ergas afirma que “cada día se hace más difícil adquirir paños cercanos a estaciones de metro, principalmente por la demanda de las inmobiliarias. Estamos viendo un alza en los precios, aunque moderada. Aún quedan paños cercanos a nuevas líneas de Metro, pero se están tomando paulatinamente”.

Álvaro Caballero de Metro: 28 nuevas estaciones y “valor agregado”
Los nuevos 37 nuevos kilómetros de las Líneas L3 (Quilicura) y L6 (San Bernardo y El Bosque) se traducirán en 28 nuevas estaciones, llegando a cubrir 26 comunas en total para el año 2018 y favoreciendo a más de 1 millón de habitantes. El inicio de operación está fijado para el año 2017, en el caso de la L3, y para el año 2018, en el de la L6.

Este proyecto –cuyas obras implican una inversión de US$2.758 millones-, busca ir más allá de construcción de las líneas y sus estaciones, afirma Álvaro Caballero, gerente Comercial y de Asuntos Corporativos: “Metro no solo es parte de la ciudad, sino que también un agente activo en la construcción de una ciudad mejor y más amable. Es por ello que durante la ingeniería de detalles de las Líneas 3 y 6 se evaluará -junto a los respectivos municipios-, las opciones para dar valor agregado a los entornos de las estaciones, contribuyendo así a mejorar la calidad de vida de la comunidad”.