3.000 nuevas viviendas se requieren para paliar déficit habitacional en Magallanes

Fuente: La Prensa Austral

Santiago, Chile. 27 marzo, 2012. En las últimas semanas, se ha conocido el caso de diferentes grupos organizados que por años han luchado por obtener una casa propia, postulando a subsidios habitacionales del Servicio de Vivienda y Urbanismo.  Esta situación la evidenciaron las más de 200 familias que mantuvieron “tomado” el terreno fiscal ubicado a un costado del Barrio Archipiélago de Chiloé de Punta Arenas.

Dicha movilización reabrió el debate del gran déficit habitacional existente en Magallanes, que según la encuesta Casen 2009, asciende a 2.463 requerimientos de viviendas nuevas, y para la Cámara Chilena de la Construcción, a 3.000.

Postulaciones

El año pasado, 416 personas fueron beneficiadas con el Fondo Solidario de Vivienda, entregando el ministerio de la cartera 336 casas propias, de las cuales 228 correspondieron a Puerto Natales, en el marco de los proyectos “Etnias Unidas”, “Pachamama”, y “Rayén”, y 108 a Punta Arenas, en el marco del proyecto “Agrupación 100”.

Por otra parte, en el grupo denominado Emergentes y de Clase Media, fueron beneficiadas con subsidios 539 familias, de las 822 que postularon.

En la región, en tanto, son 1.653 las familias divididas en 18 agrupaciones, las que han conformado grupos organizados de vecinos para efectuar postulaciones en conjunto al Serviu. De éstas, 1.085 corresponden a Punta Arenas; 344 a Puerto Natales; 116 a Porvenir; 42 a Puerto Williams y 66 a San Gregorio.

Cámara Chilena de la Construcción 

Una de las principales razones del déficit de viviendas, a juicio del presidente regional de la Cámara Chilena de la Construcción, Hernán del Canto, dice relación con el mayor costo que tienen los terrenos, señalando que esta situación se vive mayoritariamente en Punta Arenas, la cual provoca un desincentivo hacia las empresas constructoras “porque no les da el margen para trabajar el negocio. En las viviendas sociales los márgenes son muy bajos, entonces cualquier variación de los precios te perjudica notablemente”, precisó.

Otra de las causas que podría estar perjudicando la construcción de viviendas sociales, es el fuerte crecimiento que tiene el sector, lo cual significó un aumento en los precios de los materiales, fletes, etc, y de los sueldos de los trabajadores.

Esta situación se evidencia en el último Indice Nacional de la Construcción Regional (Inacor), el cual estableció que a nivel nacional se creció en un 22,9%, porcentaje que se posibilitó con el crecimiento superior al 10% de diez regiones, entre las cuales destaca Magallanes.

Cabe señalar que el promedio de alza en los sueldos de los trabajadores de la construcción, fue de un 6,9%, lo que se traduce en que la renumeración bruto de un jornal es de $300.000, mientras que un carpintero, por ejemplo, percibe mensualmente $660.000.

“Se ha movido fuerte todo lo que se refiere a costos, entonces eso va a perjudicar más el hecho de que venga una construcción de viviendas sociales, si no viene con un buen subsidio”, planteó Del Canto, destacando que en Magallanes es más cara la vivienda social por el hecho de que se debe contar con mayor metraje que en el norte del país y mantener una mejor calidad de terminación por las bajas temperaturas existentes en la zona, “por lo tanto tenemos eso y por otro lado tenemos un terreno más caro y una mano de obra más cara, entonces se están dando cada vez más incentivos para que no se hagan las viviendas sociales, entonces hay que buscar la manera de llegar a un arreglo y nosotros nos hemos acercado al gobierno y estamos viendo cómo sincerar los precios y buscar la manera de trabajar en este sentido”, precisó.

Para Del Canto, una de las fórmulas para paliar el déficit habitacional existente, es el Plan Regulador, el cual “descomprimirá la presión que hay sobre los terrenos, porque hay una presión muy grande, entonces el precio sube”, destacando que si se pone en venta una mayor cantidad de metros cuadrados, el precio bajará, por ende al expandir hacia el norte los terrenos, habrán muchas hectáreas que podrán ser utilizadas para viviendas sociales.