Copsa: “Un plan de hospitales tan exigente como el de Bachelet requiere fondos privados”

14/04/2014

• Luego de que la ministra de Salud denunciara presuntas irregularidades en las concesiones que todavía están en trámite legal, el presidente de Copsa, Rodrigo Alvarez, asegura que está elaborando un estudio para demostrar la eficiencia de este modelo para desarrollar infraestructura hospitalaria.

Fuente: La Segunda

Santiago de Chile, 11 abril de 2014. “Un programa de hospitales tan exigente como el que quiere hacer la Presidenta Michelle Bachelet me parece que va a requerir fondos públicos y privados”.

Esta es la forma en que el presidente de las concesionarias agrupadas en Copsa, Rodrigo Alvarez , se plantea ante la denuncia de presuntas irregularidades en las concesiones de hospitales que hizo el martes la ministra de Salud, Helia Molina . Luego de entregar sus antecedentes a la Contraloría, la secretaria de Estado anunció que revisará los procesos de algunos recintos como El Salvador-Geriátrico, el Sótero del Río o la Red Quinta que aún no terminan su tramitación.

Enfrentado a estos cuestionamientos, Alvarez no pierde la calma: “El objetivo es dotar al país de un número suficiente de hospitales para atender a las personas. Como Copsa, defendemos la infraestructura para las personas y nos parece que hay una demanda creciente. Y nos parece que al respecto debe haber un esfuerzo público-privado. Es esencial. Quiero recordar que todos los procesos de concesiones ya fueron revisados por el MOP, Salud y Hacienda, por la Presidencia y la Contraloría. No hay ningún proceso que no haya cruzado cada hito. Cuando se han desarrollado licitaciones altamente competitivas -en cada una han postulado al menos cuatro compañías- lo que debería resguardarse es la seguridad jurídica y el Estado de Derecho.

-¿Y si el Gobierno decide volver al estilo estatal de construir hospitales?

-El programa de concesiones consta no sólo de dos hospitales, que venían del primer gobierno de la Presidenta Bachelet (Maipú y La Florida). Hay una instrucción de fines de ese mismo gobierno que encarga un programa mucho más amplio. Y eso fue continuado en el gobierno del Presidente Piñera con las licitaciones de Antofagasta, y las que vimos ahora último. Esperamos convencer a las autoridades de que éste es un modelo muy importante no sólo para carreteras, autopistas urbanas o aeropuertos, sino que también es uno muy adecuado para infraestructura hospitalaria.

-Pero en el Gobierno aseguran que los concesionados no son mejores que los hospitales tradicionales.

-Eso no lo creemos correcto. Estamos preparando un estudio para entregárselo a las autoridades, con evidencia que indica que los tres hospitales concesionados (La Florida, Maipú y Antofagasta) son mucho más eficientes en relación con los hospitales de otras características (Gustavo Fricke, Rancagua, Cañete, Puerto Montt, Exequiel Fernández, entre otros). Desde el punto de vista del costo, de los servicios, el diseño o el tiempo de construcción. En el listado de estos últimos hospitales se ven dificultades que no han vivido los hospitales concesionados.

-También se critica que construir un hospital concesionado es más caro… y que las personas tienen que pagar más por los estacionamientos, como sucede en Maipú y La Florida.

-Discrepamos. Cuando se hace la comparación, se deben agregar todos los elementos. Por ejemplo, el diseño, la ejecución y el compromiso de mantención hospitalaria por un período de 15 años. En cuanto a los estacionamientos, han surgido informaciones equivocadas. En los hospitales que me señalan, en los horarios de máxima utilización, cada uno de ellos tiene 400 estacionamientos a disposición del hospital, de manera libre. Y a eso hay que añadir servicios que no forman parte de lo que tiene un hospital público, por ejemplo los seguros. Hace pocos años -y ahora en Iquique- vimos terremotos. Toda esta infraestructura, a diferencia de la pública, está asegurada. Y eso agrega un elemento extra. Todos los servicios que provee un hospital concesionado fueron regulados en los contratos.

-Respecto de los incentivos por cumplimiento, ¿es correcto que las concesionarias reciban “premios”?

-Dos gobiernos han usado ese instrumento en contratos absolutamente públicos. Me sorprende que se diga que una cláusula (establecida antes) pueda ahora tener un problema. En muchísimos contratos del Estado no sólo se establecen mecanismos de subsidio para la construcción o subsidios variables para el mantenimiento, sino que se pueden establecer políticas de beneficios adicionales a partir de ciertos estándares. El contrato debe cumplirse siempre, es obligación del Estado resguardarlo y de nosotros, las concesionarias, cumplirlo.

“Es válido que un gobierno quiera revisar”

-En su anterior mandato, la Presidenta Bachelet inauguró esta forma de forma de levantar hospitales… y ahora lo rechaza. ¿Por qué cree que cambiaron de opinión?

-El programa de la Presidenta Bachelet alude a que les parecía importante chequear y revisar si el modelo agregaba valor en salud y recintos penitenciarios. Me parece absolutamente razonable y válido que un gobierno quiera volver a revisar programas. Es lo que debe hacer para el buen uso de los recursos públicos. Acá hay una visión que hace decir ‘analicemos’. Una idea que no comparto, pero es válida. No creo estar luchando contra ideologías, sino convenciendo. Mi impresión es que vamos a demostrar, y la práctica lo hará también, que el modelo sí agrega valor al sistema público. Y más importante: un programa tan exigente en hospitales como el de la Presidenta Bachelet, no sólo requerirá fondos públicos sino privados, su mejor instrumento son las concesiones.

-¿Ha conversado de este tema con el ministro Alberto Undurraga (MOP)?

-La reunión con el ministro fue protocolar y que agradecemos, porque fue en un gesto especial. Nosotros habíamos pedido la reunión, pero él se adelantó. Como Copsa, estaríamos encantados de reunirnos con la ministra Molina para entregarle todos los antecedentes. Esperamos que en el caso de los hospitales de Chillán, Linares y Curicó, donde ya existía un proceso en desarrollo, finalmente se persevere, no sólo para que esas tres ciudades tengan cuanto antes hospitales, sino que también por una materia de certeza jurídica. Pero, evidentemente, es una decisión del Ejecutivo.
“Empresas seguirán invirtiendo”
Rodrigo Alvarez descartó que la postura del actual Gobierno en materia de concesiones desincentive la inversión extranjera en Chile: “Si el Gobierno, dentro de sus válidas decisiones, opta por no perseverar en el modelo de concesiones, habrá otros grupos de empresas para esas características; pero creo que la alianza público-privada tiene mucho que aportar, no sólo en carreteras, sino que también en materia de hospitales”.

Y agregó: “En Chile hay mucho campo para las concesiones. No tengo duda de que las empresas nacionales y extranjeras seguirán invirtiendo”.
Luego de que la ministra de Salud denunciara presuntas irregularidades en las concesiones que todavía están en trámite legal, el presidente de Copsa, Rodrigo Alvarez, asegura que está elaborando un estudio para demostrar la eficiencia de este modelo para desarrollar infraestructura hospitalaria.
Fuente: La Segunda
Santiago de Chile, viernes 11 abril de 2014.- “Un programa de hospitales tan exigente como el que quiere hacer la Presidenta Michelle Bachelet me parece que va a requerir fondos públicos y privados”.

Esta es la forma en que el presidente de las concesionarias agrupadas en Copsa, Rodrigo Alvarez , se plantea ante la denuncia de presuntas irregularidades en las concesiones de hospitales que hizo el martes la ministra de Salud, Helia Molina . Luego de entregar sus antecedentes a la Contraloría, la secretaria de Estado anunció que revisará los procesos de algunos recintos como El Salvador-Geriátrico, el Sótero del Río o la Red Quinta que aún no terminan su tramitación.

Enfrentado a estos cuestionamientos, Alvarez no pierde la calma: “El objetivo es dotar al país de un número suficiente de hospitales para atender a las personas. Como Copsa, defendemos la infraestructura para las personas y nos parece que hay una demanda creciente. Y nos parece que al respecto debe haber un esfuerzo público-privado. Es esencial. Quiero recordar que todos los procesos de concesiones ya fueron revisados por el MOP, Salud y Hacienda, por la Presidencia y la Contraloría. No hay ningún proceso que no haya cruzado cada hito. Cuando se han desarrollado licitaciones altamente competitivas -en cada una han postulado al menos cuatro compañías- lo que debería resguardarse es la seguridad jurídica y el Estado de Derecho.

-¿Y si el Gobierno decide volver al estilo estatal de construir hospitales?

-El programa de concesiones consta no sólo de dos hospitales, que venían del primer gobierno de la Presidenta Bachelet (Maipú y La Florida). Hay una instrucción de fines de ese mismo gobierno que encarga un programa mucho más amplio. Y eso fue continuado en el gobierno del Presidente Piñera con las licitaciones de Antofagasta, y las que vimos ahora último. Esperamos convencer a las autoridades de que éste es un modelo muy importante no sólo para carreteras, autopistas urbanas o aeropuertos, sino que también es uno muy adecuado para infraestructura hospitalaria.

-Pero en el Gobierno aseguran que los concesionados no son mejores que los hospitales tradicionales.

-Eso no lo creemos correcto. Estamos preparando un estudio para entregárselo a las autoridades, con evidencia que indica que los tres hospitales concesionados (La Florida, Maipú y Antofagasta) son mucho más eficientes en relación con los hospitales de otras características (Gustavo Fricke, Rancagua, Cañete, Puerto Montt, Exequiel Fernández, entre otros). Desde el punto de vista del costo, de los servicios, el diseño o el tiempo de construcción. En el listado de estos últimos hospitales se ven dificultades que no han vivido los hospitales concesionados.

-También se critica que construir un hospital concesionado es más caro… y que las personas tienen que pagar más por los estacionamientos, como sucede en Maipú y La Florida.

-Discrepamos. Cuando se hace la comparación, se deben agregar todos los elementos. Por ejemplo, el diseño, la ejecución y el compromiso de mantención hospitalaria por un período de 15 años. En cuanto a los estacionamientos, han surgido informaciones equivocadas. En los hospitales que me señalan, en los horarios de máxima utilización, cada uno de ellos tiene 400 estacionamientos a disposición del hospital, de manera libre. Y a eso hay que añadir servicios que no forman parte de lo que tiene un hospital público, por ejemplo los seguros. Hace pocos años -y ahora en Iquique- vimos terremotos. Toda esta infraestructura, a diferencia de la pública, está asegurada. Y eso agrega un elemento extra. Todos los servicios que provee un hospital concesionado fueron regulados en los contratos.

-Respecto de los incentivos por cumplimiento, ¿es correcto que las concesionarias reciban “premios”?

-Dos gobiernos han usado ese instrumento en contratos absolutamente públicos. Me sorprende que se diga que una cláusula (establecida antes) pueda ahora tener un problema. En muchísimos contratos del Estado no sólo se establecen mecanismos de subsidio para la construcción o subsidios variables para el mantenimiento, sino que se pueden establecer políticas de beneficios adicionales a partir de ciertos estándares. El contrato debe cumplirse siempre, es obligación del Estado resguardarlo y de nosotros, las concesionarias, cumplirlo.

“Es válido que un gobierno quiera revisar”

-En su anterior mandato, la Presidenta Bachelet inauguró esta forma de forma de levantar hospitales… y ahora lo rechaza. ¿Por qué cree que cambiaron de opinión?

-El programa de la Presidenta Bachelet alude a que les parecía importante chequear y revisar si el modelo agregaba valor en salud y recintos penitenciarios. Me parece absolutamente razonable y válido que un gobierno quiera volver a revisar programas. Es lo que debe hacer para el buen uso de los recursos públicos. Acá hay una visión que hace decir ‘analicemos’. Una idea que no comparto, pero es válida. No creo estar luchando contra ideologías, sino convenciendo. Mi impresión es que vamos a demostrar, y la práctica lo hará también, que el modelo sí agrega valor al sistema público. Y más importante: un programa tan exigente en hospitales como el de la Presidenta Bachelet, no sólo requerirá fondos públicos sino privados, su mejor instrumento son las concesiones.

-¿Ha conversado de este tema con el ministro Alberto Undurraga (MOP)?

-La reunión con el ministro fue protocolar y que agradecemos, porque fue en un gesto especial. Nosotros habíamos pedido la reunión, pero él se adelantó. Como Copsa, estaríamos encantados de reunirnos con la ministra Molina para entregarle todos los antecedentes. Esperamos que en el caso de los hospitales de Chillán, Linares y Curicó, donde ya existía un proceso en desarrollo, finalmente se persevere, no sólo para que esas tres ciudades tengan cuanto antes hospitales, sino que también por una materia de certeza jurídica. Pero, evidentemente, es una decisión del Ejecutivo.
“Empresas seguirán invirtiendo”
Rodrigo Alvarez descartó que la postura del actual Gobierno en materia de concesiones desincentive la inversión extranjera en Chile: “Si el Gobierno, dentro de sus válidas decisiones, opta por no perseverar en el modelo de concesiones, habrá otros grupos de empresas para esas características; pero creo que la alianza público-privada tiene mucho que aportar, no sólo en carreteras, sino que también en materia de hospitales”.

Y agregó: “En Chile hay mucho campo para las concesiones. No tengo duda de que las empresas nacionales y extranjeras seguirán invirtiendo”.
Luego de que la ministra de Salud denunciara presuntas irregularidades en las concesiones que todavía están en trámite legal, el presidente de Copsa, Rodrigo Alvarez, asegura que está elaborando un estudio para demostrar la eficiencia de este modelo para desarrollar infraestructura hospitalaria.
Fuente: La Segunda
Santiago de Chile, viernes 11 abril de 2014.- “Un programa de hospitales tan exigente como el que quiere hacer la Presidenta Michelle Bachelet me parece que va a requerir fondos públicos y privados”.

Esta es la forma en que el presidente de las concesionarias agrupadas en Copsa, Rodrigo Alvarez , se plantea ante la denuncia de presuntas irregularidades en las concesiones de hospitales que hizo el martes la ministra de Salud, Helia Molina . Luego de entregar sus antecedentes a la Contraloría, la secretaria de Estado anunció que revisará los procesos de algunos recintos como El Salvador-Geriátrico, el Sótero del Río o la Red Quinta que aún no terminan su tramitación.

Enfrentado a estos cuestionamientos, Alvarez no pierde la calma: “El objetivo es dotar al país de un número suficiente de hospitales para atender a las personas. Como Copsa, defendemos la infraestructura para las personas y nos parece que hay una demanda creciente. Y nos parece que al respecto debe haber un esfuerzo público-privado. Es esencial. Quiero recordar que todos los procesos de concesiones ya fueron revisados por el MOP, Salud y Hacienda, por la Presidencia y la Contraloría. No hay ningún proceso que no haya cruzado cada hito. Cuando se han desarrollado licitaciones altamente competitivas -en cada una han postulado al menos cuatro compañías- lo que debería resguardarse es la seguridad jurídica y el Estado de Derecho.

-¿Y si el Gobierno decide volver al estilo estatal de construir hospitales?

-El programa de concesiones consta no sólo de dos hospitales, que venían del primer gobierno de la Presidenta Bachelet (Maipú y La Florida). Hay una instrucción de fines de ese mismo gobierno que encarga un programa mucho más amplio. Y eso fue continuado en el gobierno del Presidente Piñera con las licitaciones de Antofagasta, y las que vimos ahora último. Esperamos convencer a las autoridades de que éste es un modelo muy importante no sólo para carreteras, autopistas urbanas o aeropuertos, sino que también es uno muy adecuado para infraestructura hospitalaria.

-Pero en el Gobierno aseguran que los concesionados no son mejores que los hospitales tradicionales.

-Eso no lo creemos correcto. Estamos preparando un estudio para entregárselo a las autoridades, con evidencia que indica que los tres hospitales concesionados (La Florida, Maipú y Antofagasta) son mucho más eficientes en relación con los hospitales de otras características (Gustavo Fricke, Rancagua, Cañete, Puerto Montt, Exequiel Fernández, entre otros). Desde el punto de vista del costo, de los servicios, el diseño o el tiempo de construcción. En el listado de estos últimos hospitales se ven dificultades que no han vivido los hospitales concesionados.

-También se critica que construir un hospital concesionado es más caro… y que las personas tienen que pagar más por los estacionamientos, como sucede en Maipú y La Florida.

-Discrepamos. Cuando se hace la comparación, se deben agregar todos los elementos. Por ejemplo, el diseño, la ejecución y el compromiso de mantención hospitalaria por un período de 15 años. En cuanto a los estacionamientos, han surgido informaciones equivocadas. En los hospitales que me señalan, en los horarios de máxima utilización, cada uno de ellos tiene 400 estacionamientos a disposición del hospital, de manera libre. Y a eso hay que añadir servicios que no forman parte de lo que tiene un hospital público, por ejemplo los seguros. Hace pocos años -y ahora en Iquique- vimos terremotos. Toda esta infraestructura, a diferencia de la pública, está asegurada. Y eso agrega un elemento extra. Todos los servicios que provee un hospital concesionado fueron regulados en los contratos.

-Respecto de los incentivos por cumplimiento, ¿es correcto que las concesionarias reciban “premios”?

-Dos gobiernos han usado ese instrumento en contratos absolutamente públicos. Me sorprende que se diga que una cláusula (establecida antes) pueda ahora tener un problema. En muchísimos contratos del Estado no sólo se establecen mecanismos de subsidio para la construcción o subsidios variables para el mantenimiento, sino que se pueden establecer políticas de beneficios adicionales a partir de ciertos estándares. El contrato debe cumplirse siempre, es obligación del Estado resguardarlo y de nosotros, las concesionarias, cumplirlo.

“Es válido que un gobierno quiera revisar”

-En su anterior mandato, la Presidenta Bachelet inauguró esta forma de forma de levantar hospitales… y ahora lo rechaza. ¿Por qué cree que cambiaron de opinión?

-El programa de la Presidenta Bachelet alude a que les parecía importante chequear y revisar si el modelo agregaba valor en salud y recintos penitenciarios. Me parece absolutamente razonable y válido que un gobierno quiera volver a revisar programas. Es lo que debe hacer para el buen uso de los recursos públicos. Acá hay una visión que hace decir ‘analicemos’. Una idea que no comparto, pero es válida. No creo estar luchando contra ideologías, sino convenciendo. Mi impresión es que vamos a demostrar, y la práctica lo hará también, que el modelo sí agrega valor al sistema público. Y más importante: un programa tan exigente en hospitales como el de la Presidenta Bachelet, no sólo requerirá fondos públicos sino privados, su mejor instrumento son las concesiones.

-¿Ha conversado de este tema con el ministro Alberto Undurraga (MOP)?

-La reunión con el ministro fue protocolar y que agradecemos, porque fue en un gesto especial. Nosotros habíamos pedido la reunión, pero él se adelantó. Como Copsa, estaríamos encantados de reunirnos con la ministra Molina para entregarle todos los antecedentes. Esperamos que en el caso de los hospitales de Chillán, Linares y Curicó, donde ya existía un proceso en desarrollo, finalmente se persevere, no sólo para que esas tres ciudades tengan cuanto antes hospitales, sino que también por una materia de certeza jurídica. Pero, evidentemente, es una decisión del Ejecutivo.
“Empresas seguirán invirtiendo”
Rodrigo Alvarez descartó que la postura del actual Gobierno en materia de concesiones desincentive la inversión extranjera en Chile: “Si el Gobierno, dentro de sus válidas decisiones, opta por no perseverar en el modelo de concesiones, habrá otros grupos de empresas para esas características; pero creo que la alianza público-privada tiene mucho que aportar, no sólo en carreteras, sino que también en materia de hospitales”.

Y agregó: “En Chile hay mucho campo para las concesiones. No tengo duda de que las empresas nacionales y extranjeras seguirán invirtiendo”.