Auge minero y el boom inmobiliario

Santiago, Chile. 25 septiembre, 2012. Con US$ 104.000 millones de inversión en el país hasta 2020, la minería registra un verdadero auge en Chile. Dicha expansión traerá como consecuencia la necesidad de cubrir más de 73.000 puestos de trabajo en los próximos años sólo en el norte, lo que significará importantes niveles de flujos de personas que se trasladarán de ciudades.

Lo anterior da como resultado una correlación positiva entre el desarrollo minero y el crecimiento del sector inmobiliario. De esta forma, cuanto más crece el número de profesionales asociados a la minería, más aumenta el número de personas que buscan una residencia o incluso una segunda vivienda de calidad cerca de sus trabajos.

En el caso concreto de la Cuarta Región, hasta fines de la próxima década se espera que la inversión en activos directos y colaterales sean de varios millones de dólares americanos, con la consecuente contratación de más profesionales. El efecto colateral de los servicios y la logística asociada a la minería, junto con la estabilidad de las variables macroeconómicas ha generado –al igual que en el resto de las regiones mineras del país- el desarrollo de nuevos proyectos inmobiliarios y el aumento de las ventas en complejos ya consolidados. Ejemplo de esto es La Serena Golf, donde la demanda ligada a la industria minera representa un 60% de las ventas tanto en primera como en segunda vivienda.

A esto hay que sumar que la región de Coquimbo y el sector de La Serena tienen una plusvalía que va en aumento y que se potencia con la construcción de la carretera doble vía entre La Serena y Vallenar, proyecto que brindará excelente conexión al borde costero norte, aumentando el interés de vivir en la zona.

Sumado a lo anterior, La Serena está realizando gran cantidad de obras viales e infraestructura, buscando convertirse en la ciudad con la mejor calidad de vida del país, a lo que se agregan las bondades naturales que la caracterizan como el clima, la casi nula contaminación y sus bellos paisajes. De esta forma, es de esperar que el boom inmobiliario en la zona continúe creciendo a pasos agigantados.