Aeródromo de Chiloé iniciará pruebas para recibir vuelos nacionales

• Aerolíneas esperan certificación de Dirección de Aeronáutica para iniciar viajes. Marcha blanca parte este mes.

Fuente: El Mercurio

Santiago, Chile. 5 junio, 2012. En forma acelerada se rematan las últimas obras para habilitar el Aeródromo de Mocopulli, ubicado en la comuna de Dalcahue y a 12 km al norte de Castro, que promete -tras tres décadas- poner de nuevo a Chiloé en los itinerarios de las aerolíneas comerciales del país.

La inversión bordea los $ 18.000 millones y es una de las obras del Plan Chiloé. Considera una pista de 45 metros de ancho y 2.000 de largo, que permite la operación de los Air Bus 320. Además, tiene una torre de control y una casa, a lo que se suma un terminal de pasajeros, de 700 m2. Éste, inicialmente atenderá a 80 personas, pero podría ampliarse, dependiendo de la demanda.

La pista está terminada, se instaló gran parte de la señalética de seguridad y sólo se finiquitan obras complementarias para evitar la erosión en las canaletas por las que escurren las aguas lluvia. Incluso, parte del mobiliario ya está embalado.

La Dirección de Arquitectura del MOP entregará el aeródromo antes de fin de mes a la Dirección de Aeronáutica para iniciar las pruebas. Luego vendrá una marcha blanca que se extendería hasta por tres meses antes que parta la operación oficial con pasajeros.

En Lan Chile afirman que aguardan que se les comunique oficialmente cuándo podrán comenzar las operaciones. Mientras, ya han hecho varias visitas técnicas al terminal.

Los vuelos nacionales son esperados con ansias en Chiloé, sobre todo entre productores acuícolas y operadores turísticos. Los primeros, incluso, garantizarían carga por cada frecuencia que tenga la línea aérea a la zona, pues así sacarían pescado a mercados externos, algo que hoy se dificulta por las horas extras que implica el traslado por tierra a Puerto Montt.

“Le va a generar harto movimiento a la isla. El turista llega a Puerto Montt y desde ahí tiene como mínimo tres horas a Castro en auto”, explica Anita Azócar, dueña del Hotel Patagonia Insular. De ahí a Quellón son otras tres horas más, pues, aunque son 90 km, la ruta está en malas condiciones.

Con la puesta en operación del aeródromo, los chilotes estarán en horas en Santiago y no tardarán hasta tres días, con costos adicionales, como el cruce en transbordador por el canal de Chacao. “Esto dará un plus importante a la conectividad, pues Chiloé es un destino internacional”, dice Elsón Cárcamo, edil de Puqueldón y presidente de la Asociación de Municipios de Chiloé.